Sistemas Aumentativos Alternativos de Comunicación. Silvia Molia Galarreta, Logopeda del Creer
La capacidad para hablar es el principio que distingue al ser humano. El proceso de adquisición del habla significa aprender a utilizar un código de símbolos, uso de conceptos, elaboración adecuada de frases…y para ello debemos disponer de una serie de requisitos que de forma resumida serán la maduración del sistema nervioso, funcionalidad del aparato fonador, tener un nivel de audición optimo, un grado de inteligencia mínimo, relación interpersonal/social...
La comunicación y el lenguaje nos permiten exteriorizar ideas, recuerdos, conocimientos, deseos…e interiorizarlos al mismo tiempo. Es lo que nos permite relacionarnos con los demás para aprender, disfrutar y para participar en la sociedad.
Por esta razón, todas las personas que por cualquier causa no han adquirido o han perdido un nivel de habla suficiente para comunicarse de forma satisfactoria, podrán usar un Sistema Aumentativo Alternativo de Comunicación, en adelante SAAC, que son formas de expresión distintas al lenguaje hablado, que tienen como objetivo aumentar y/o compensar las dificultades de comunicación y lenguaje.
Existen dos tipos, los sistemas aumentativos, que complementan el lenguaje oral cuando, por sí sólo, no es suficiente para entablar una comunicación efectiva con el entorno y los sistemas alternativos, que sustituyen al lenguaje oral cuando éste no es comprensible o está ausente.
Ambos sistemas, permiten que las personas con dificultades de comunicación puedan relacionarse e interactuar con los demás, manifestando sus opiniones, sentimientos y la toma de decisiones personales para afrontar y controlar su propia vida.
Vamos a enumerar varios de estos sistemas para que el lector tenga una mínima visión de los mismos:
Sistemas pictográficos: Podemos comunicarnos utilizando objetos reales, fotos, dibujos o pictogramas. Un sistema pictográfico es la representación del lenguaje mediante dibujos, fotos o imágenes. El uso de pictogramas no es exclusivo de estos sistemas. Si observamos a nuestro alrededor, encontramos numerosos tipos de ellos que nos ayudan a encontrar lugares, a organizar la circulación, etc.
Tablero o cuaderno de comunicación
Es un soporte en el que están organizados aquellos elementos que utilizamos para comunicarnos: pictogramas, letras, sílabas, etc. En un cuaderno de comunicación podemos usar varias páginas. Si podemos indicar, señalaremos las casillas para componer el mensaje. Si tenemos dificultades en el uso, nuestro interlocutor realizará un barrido manual por el tablero. Es decir, señalará las casillas para que podamos confirmarle cuáles forman el mensaje.
Comunicador portátil
Es un dispositivo que, mediante síntesis de voz o voz grabada, nos permite decir en voz alta nuestro mensaje. Si podemos pulsar directamente, presionaremos las casillas hasta crear el mensaje. Si no podemos, utilizaremos un barrido automático, es decir, las casillas que aparecen en el comunicador o en la pantalla del ordenador se iluminarán secuencialmente y, mediante un dispositivo de acceso, seleccionaremos las que forman el mensaje. Los dispositivos de acceso se manejan con un movimiento voluntario de alguna parte de nuestro cuerpo, como la mano, la barbilla, la cabeza, el codo, la rodilla, etc.
Programa informático
Existen programas de ordenador específicos para comunicarnos a través de pictogramas o mediante letras, palabras, enunciados, etc. La aparición de ordenadores cada vez más pequeños, como móviles, agendas personales digitales (PDAs), etc., posibilita llevar el dispositivo siempre con nosotros y hablar en cualquier lugar donde nos encontremos.
El éxito en la utilización de los SAAC, no solo consiste en tener un comunicador, un programa o un tablero. Sino también en que la persona tenga cada vez más oportunidades de conversar, charlar y participar usando estos dispositivos.